Tips para crisis de ansiedad

19/05/20

El concepto de ansiedad se refiere a una sensación o estado emocional normal ante determinadas situaciones cotidianas estresantes. No siempre es patológica, sino que es una respuesta adaptativa del organismo. Experimentamos conmoción, intranquilidad, nerviosismo o preocupación, la respiración se vuelve acelerada, se eleva la frecuencia cardíaca y puede existir sudoración o escalofríos entre otras manifestaciones.Dentro de las causas que generan una crisis de ansiedad, lo más habitual, es que este tipo de episodios se asocien a causas como el estrés pero puede también desencadenarse por el consumo de alcohol y/u otras sustancias o por una patología física como el hipertiroidismo.

Qué hacer ante una crisis de ansiedad?

Lo primero que tenemos que tratar de hacer, es mantener la calma, no dejarnos llevar por el miedo, tratar de ir normalizando nuestra respiración, inspirando por la nariz y expirando por la boca de forma rítmica y cada vez más pausada.
Cuando el estrés ha sido el desencadenante de la crisis, en la mayoría de los casos no es necesario ningún tipo de tratamiento, pero sí, adquirir hábitos saludables de vida que nos ayuden a prevenir nuevos episodios y adoptar un nuevo estilo de vida saludable.

Ejercicios: Practicar ejercicio físico de forma regular, en especial al aire libre, también ayuda a despejar la mente y evitar los sentimientos ansiosos. Es una buena manera de descargar el estrés y relajarse. Salir a correr o caminar nos lleva a liberar y activar músculos del cuerpo tensionados por la ansiedad.
Relajación: ayuda a reducir la tensión muscular, disminuir la frecuencia cardíaca así como la presión sanguínea. Cuando tenemos problemas para dormirnos, este método también puede ayudarnos a descansar mejor. Cuando se relajan los músculos, el cuerpo recibe la señal de que estamos en buenas condiciones para dormirnos.
Respiración: inspirar y expirar correctamente el aire, activando los mecanismos pulmonares, entre cinco y diez minutos ayudará a controlar la ansiedad, así nuestro cuerpo y nuestra mente solo se concentran en dicha actividad.
Meditar: es un ejercicio también recomendado, nos permite abstraernos del pensamiento o de la situación que nos genera ansiedad, tomando distancia de ella y situando nuestra mente en cualquier otra idea, ayudando a reducir la tensión.
Escuchar música: muchas personas encontramos en las notas musicales el ritmo necesario para hacer disminuir la ansiedad. La música clásica, o simplemente relajante, libera la mente de preocupaciones, aunque sea de forma parcial.
Alimentación saludable: Las almendras por ejemplo son uno de los frutos secos que ayudan a combatir la ansiedad al ser ricas en vitamina B2 y E, sirviendo también para reforzar el sistema inmune en momentos de estrés. Las semillas de Chía contienen triptófano, un aminoácido que ayuda a la liberación de serotonina, lo que nos da una sensación de calma y nos reduce la ansiedad.
Mantener una alimentación variada y balanceada nos ayuda a equilibrar nuestro estado de ánimo, y sentirnos mejor. Algunos alimentos nos ayudan a calmar la mente al producir serotonina en nuestro cerebro, otros nos relajan al tener un efecto calmante y otros controlan nuestra ansiedad por comer al producir saciedad.

En cualquier caso, frente a una crisis de ansiedad, es importante consultar con el médico tratante y procurar identificar qué ha motivado la crisis. En función de ello podrá instaurarse el tratamiento más adecuado en cada caso, pudiendo o no contemplarse el uso de fármacos y/o terapia psicológica.

Lic Ps Lourdes Rodríguez Lombardo
Unidad Promoción de Relacionamiento Interno
Gerencia Área Gestión de Ayudas al Personal

P.h: Pinterest

.

Autor/Fuente: Lic Ps Lourdes Rodríguez Lombardo

Publicar comentario