Cómo ayudar en clase a alumnos con TDAH
18 técnicas sencillas para profesores
Escrito por Keath Low
Traducido por la Dra. Elena Díaz de Guereñu
Texto original en inglés
Si tienes un hijo o un alumno con TDAH (Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad), esta lista es para ti.
Unos simples cambios y estrategias aplicadas en el aula a menudo pueden marcar una gran diferencia en el éxito de un niño en la escuela.
Estrategias para el aula
1. Las normas de la clase deben ser claras y concisas. Repásalas con el estudiante regularmente. Es útil hacer que el niño repita las reglas, objetivos u otras instrucciones para asegurarse de que las entiende. Estas reglas deben ser colocadas en un lugar visible del aula.
2. Asegúrate de que el estudiante se sienta cerca del maestro y lejos de las distracciones (la puerta, las ventanas, papelera, el sacapuntas…)
3. Dale al estudiante respuestas y consecuencias frecuentes e inmediatas a su comportamiento.
4. Píllale portándose bien y elógiale de inmediato. Ignora las conductas negativas de poca importancia que no perturben la clase.
5. Utiliza recompensas e incentivos, más que castigos, para motivar al alumno y hacer que la escuela sea para él un lugar agradable. Cambia las recompensas con frecuencia, para evitar que el alumno llegue a aburrirse.
6. Permite al alumno hacer pausas frecuentes en las que pueda moverse (entregar o recoger ejercicios, ir a hacer un recado a tu despacho u otro lugar del colegio, borrar la pizarra, ir a beber agua a la fuente…)
7. Permítele moverse mientras trabaja. Déjale ponerse de pie en su pupitre, si eso le ayuda a mantener la concentración.
8. Pega en su pupitre una tarjeta con las normas de clase. Ayúdale a seguir el programa revisando varias ocasiones al día y prepárale para los cambios de clase.
9. Limita las distracciones, el ruido excesivo, las distracciones visuales, el desorden, etc. (Para algunos niños con TDAH, escuchar “ruido blanco” o música suave puede ayudarles a concentrarse y mantener la atención)
10. Reduce la carga de trabajo del alumno. Divide las tareas en pasos.
11. Dale instrucciones concisas, de uno o dos pasos. Evita “sobrecargarle” con demasiada información.
12. Tócale suavemente el hombro, la mano o el brazo mientras le hablas, para ayudarle a atender a lo que le dices.
13. Permítele tener en la mano una pelota koosh o una bola de plastilina (“silly putty”). Esta ligera estimulación puede ayudarle a mantener la atención.
14. Si la escuela lo permite, le puede venir bien mascar chicle, para liberar energía y mantener la concentración.
15. Programa las asignaturas más difíciles por la mañana, cuando el alumno (igual que el resto de la clase) se encuentra más fresco y descansado.
16. No le castigues sin recreo por un comportamiento negativo (a los niños con TDAH les viene muy bien la actividad física del recreo y suelen concentrarse mejor después del ejercicio)
17. Utiliza temporizadores, señales horarias grabadas, o indicaciones verbales para mostrar cuánto tiempo le queda para terminar una actividad.
18. Empareja el alumno con un “colega de estudio”: un compañero amable y maduro que pueda ayudar a dar recordatorios o reorientarle cuando se despiste.
.Autor/Fuente: Omar Fuksman
Excelente artículo ! Gracias por compartirlo